La educación es hoy por hoy el pilar básico para el cambio de comportamiento de la población. Empezando por los niños/as en edad escolar a través de la asimilación de conductas ambientales responsables en edades posteriores, además del efecto disuasorio que generan no sólo en el ámbito escolar sino, especialmente en el familiar.
Cuando los niños/as se encargan de que todos los residuos orgánicos que se generen en el Centro Escolar (en el comedor, en el jardín,…) vuelvan a integrarse en un ciclo natural a través de un proceso sencillo y limpio como es el vermicompostaje, se estará dando tratamiento a un problema real con todas sus repercusiones hacia el entorno, ya que el compostaje es una solución simple y de gran eficacia.